Florin Valentín Mica, llegó a Onda con apenas tres años y siete meses de edad, y pese a venir del frío continental de Europa, lo primero que debió sentir fue nuestro “Airet de Fira”, era el mes de octubre de 2002.
Había nacido el 29 de marzo de 1999 en Targoviste (Rumanía), una histórica ciudad, capital del condado de Dambovita cercano y lindante con Transilvania. En el corazón mismo de Ţara Românească epicentro del que nace la actual Rumania.
Targoviste es una ciudad del tamaño de Castellón de la Plana, si bien mucho más histórica, y monumental que nuestra capital. Se da la grata circunstancia que actualmente ambas ciudades están hermanadas. Cuando Florín llegó a España, su ciudad de nacimiento tenía 89.429 habitantes.
Si bien el nombre de la cuidad hace referencia a la tradición comercial del lugar, pues “targ” significa mercado, y el sufijo “iste” significa lugar, los de Targoviste son gente de carácter fuerte y decidido, como bien nos ha sabido recordar Florin en más de una ocasión.
Pese a este apacible nombre, Targoviste es una ciudad de valientes. Allí, capitaneados entonces por (Mihai Viteazu), Miguel El Valiente, encontraron freno a sus desmanes los otomanos en tiempos remotos y Nicolae Seausescu en tiempos recientes. En Targoviste fueron juzgados y ejecutados en 1989 el dictador y su esposa.
Hecha esta semblanza del lugar y sus circunstancias, que nos sirva para recordar que las causas de la emigración pueden afectarnos a todos por igual, al margen de la prosperidad que un lugar haya tenido en tiempos más o menos cercanos, como bien pueden atestiguar muchos compatriotas nuestros que conocieron ese sinsabor durante los años cincuenta y posteriores del pasado siglo XX.
Florin Valentín Mica, hijo de Mirela y Vasile llegó a Onda en el mes de octubre de 2002, apenas unos meses después que lo hicieran sus padres. Teniendo en cuenta la edad con la que llegó, traído por sus abuelas a los brazos paternos, se puede afirmar que sus segundos y terceros pasos fueron dados por nuestras calles y plazas, pero, necesariamente, sus primeros recuerdos son y serán siempre de Onda.
Florin ingresó en el CD Onda la temporada 2005/2006, como pre-benjamín de primer año. Su primer entrenador fue Vicente Marco en el Pre-benjamín “C”. La temporada 2006/2007 también estuvo con Marco en el Pre-benjamín “A”. En la 2007/2008 estuvo en el Benjamín “C” a las órdenes de Victor Masjuan. Con Carles Barraganes su actual entrenador, estuvo en la 2008/2009, con el Benjamín “B” y la 2009 /2010 con Alevín “D” su actual equipo.
Sus aptitudes futbolísticas no hace falta adornarlas, su trabajo, esfuerzo y fe en la victoria, su inquebrantable moral, unidos a una habilidad y velocidad endiabladas, junto a su insaciable hambre de gol le hacen uno de los jugadores más decisivos de la Generación 99.
En la actual temporada Florín ha afianzado su vertiente de goleador. Lleva 30 goles marcados en temporada regular, sin haber concluido ésta todavía. Muchos de ellos decisivos para la victoria final.
Florin, de forma inmediata, la misma semana que cierren las escuelas, vuelve a Targoviste la ciudad que le vio nacer. Deja, con dolor mutuo, Onda la ciudad que le vio crecer. Lo hace con parte de su familia, una vez más, separada en dos mitades por las necesidades económicas, las penurias y vicisitudes que atraviesa el Viejo Continente.
Su padre, Vasile, les acompaña en el viaje, pero volverá con nosotros al finalizar las vacaciones, al menos durante algún tiempo, ojalá que para siempre, lo que nos haría albergar esperanzas de poder ver de nuevo a Florin, si no ya corretear por nuestras calles y plazas, pues como toda su G-99 se está haciendo todo un hombre, si al menos verle correr por esa banda derecha, hecho una flecha en ataque y en defensa del CD Onda. Verle salir, tan veloz y resolutivo como por la banda, por el pasillo de La Cossa, recién duchado, siempre el primero, camino de la puerta de la calle San Fermín para esperar a su padre.
Cuando dentro de unos años Florin triunfe en el mundo del fútbol, Targoviste es cuidad de futbolistas: al menos 4 figuran entre sus personalidades más destacadas junto a escultores, escritores, filólogos, economistas y pintores de renombre, se acordará de sus inicios en la Escuela de Fútbol Base del CD Onda, la de su pueblo.
Cuando vayamos entre la multitud a pedirle un autógrafo, bastará con decir “somos de Onda” para que Florín nos dé preferencia.
Y si no llegan las mieles del triunfo, a Florin El Valiente, le querremos igual. Aquí siempre tendrá su casa, sus amigos, su colegio, su club.
Y si alguna vez nos tocara desplazarnos y viajar por placer o por trabajo, pensaremos en Targoviste, el lugar de mercado, la capital de Dambovita , la ciudad hermana de Castellón, la cuna de futbolistas, que para entonces ya habrá recuperado, de la mano de Florin, la prosperidad.
Como hemos dejado escrito en el cuadro que te vamos a entregar el sábado, con tu equipo y tus colores: “Florín, No nos olvides, nosotros a ti NUNCA”
¡! Hasta siempre!!
